El domingo se puso en marcha la 87ª. Sesión General de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) en Francia, donde Uruguay refirió su óptimo status sanitario en cuanto a fiebre aftosa, encefalopatía espongiforme bovina y peste equina, así como a remarcar su compromiso con el bienestar animal, por ser el primer centro de referencia para América.

El esfuerzo mancomunado entre el sector público -en este caso la Dirección General de Servicios Ganaderos- y los productores es el que posibilita los avances y poner a Uruguay en el mundo como un ejemplo a seguir.

Más allá de las novedades que surjan en el encuentro del organismo cuyas reglas sanitarias son referencia para el comercio mundial, hay oportunidades de contactos bilaterales que permiten acelerar aspectos comerciales.

“Apuntamos a tener algunas entrevistas con jerarcas sanitarios de la Unión Europea, México e Israel haciendo especial hincapié en el compartimento ovino de alta bioseguridad que desarrolló Uruguay, buscando hasta dónde podemos llegar para la habilitar el ingreso de carne ovina con hueso”, explicó Eduardo Barre, titular de la Dirección General de Servicios Ganaderos del MGAP. Barre compartirá la delegación uruguaya con Patricia Lagarmilla (MGAP) y el sector privado (Asociación Rural del Uruguay) estará representado por Jorge Bonino Morlán, que concurre por 31 años consecutivos.

Bonino reconoció la oportunidad de continuar avanzando en las negociaciones bilaterales con México para poder colocar cortes ovinos con hueso procedentes del compartimento, pero pertenecientes a animales adultos. En este caso las conversaciones están adelantadas, pero hubo un cambio del director del servicio sanitario.

“Hay que ver todas las posibilidades de apertura de mercado y para eso saber la realidad y los avances en la sanidad es fundamental”, explicó a El País el delegado de los productores en la comitiva uruguaya.

AVANCES. En 2018, Uruguay presentó dos dossier apuntando a ser reconocido como país libre de pleuroneumonía contagiosa bovina y peste porcina clásica. “Son enfermedades que están en varios protocolos para exportación, tanto de carne como de animales en pie”, recordó Barre.

Pero más allá de estas novedades que también pondrán a Uruguay en la mira del mundo, para el sector privado y para el MGAP, la estrategia está en “traer la mayor información posible respecto a la sanidad en los distintos países, con especial atención en la peste porcina africana que está afectando a China y con todas las repercusiones comerciales que trae”, explicó Bonino previo a su partida.

Es fundamental para Uruguay, un país con base agropecuaria, el capítulo fiebre aftosa. “Siempre estamos trabajando y buscando evitar que los países libres con reconocido status sanitario, por el hecho de realizar la vacunación, no sufran tantas trabas desde el punto de vista comercial sin argumentaciones técnicas sólidas”, agregó Bonino. No menos importante para el Uruguay, por más que sea un país libre, es la presencia en el mundo de plurigo lumbar o scrapie en ovinos, que afecta severamente la comercialización de animales en pie y carne.

A su vez, hay otras epidemias que amenazan la sanidad mundial y donde la puesta a punto del mapa de los focos es básico.

La OIE está muy preocupada con la resistencia a los antimicrobianos, fungicidas y antiparasitarios. “Queremos demostrar que Uruguay está preocupado y trabajando en el tema, en el marco del apoyo entre públicos y privados”, afirmó Bonino. En este campo se unen esfuerzos con Salud Pública, porque es un problema que afecta a animales y humanos.

Más de 1000 delegados en el encuentro. Se esperan alrededor de 1000 participantes en la Sesión General de la OIE, incluyendo representantes de los 182 Países miembros de la OIE, así como socios regionales e internacionales. Durante este evento, se adoptarán nuevas normas intergubernamentales para la sanidad y el bienestar animal. La directora General de la OIE, Dra. Monique Eloit, presentará los avances realizados en el 6.o Plan Estratégico (2016-2020).