Un nuevo informe sobre biocombustibles, de la mano de Claudio Molina, nos detalla que “Argentina pide a EEUU acelerar revisión de aranceles a biodiésel argentino”. Allí, el medio Reuters explica el ministro de Producción y Trabajo de Argentina, Dante Sica, dijo que le solicitó a Estados Unidos que acelere el proceso de revisión de los derechos antidumping y compensatorios que aplicó a las importaciones de biodiésel argentino.

Argentina es un exportador mundial líder de biodiésel, pero en los últimos años el sector -que cuenta con productores de la talla de Cargill y Bunge- ha recibido sanciones comerciales por acusaciones de competencia desleal, que hasta el momento ha podido sortear redireccionando sus embarques. En febrero, la Unión Europea, que también había impuesto aranceles que oscilan entre el 25 y el 33,4 por ciento al biodiésel argentino, autorizó a ocho compañías productoras basadas en Argentina a exportar su mercadería al bloque sin abonar aranceles, siempre que vendan el biocombustible a un precio mínimo establecido.

Con un panorama muy poco alentador, dos noticias publicada por BAE Negocios hundieron la poca esperanza que existía en el sector. “Lopetegui no dio marcha atrás con el precio del biodiésel, pero mantiene reuniones con el sector”, fue la primera publicación del medio. Con diferencia de tan solo un día, la web sacó un nuevo titular: “Lopetegui reconoció que el futuro precio de los biocombustibles dependen de Dujovne”. Una complicación que no se mejora, y que en vez de resolverla los actores de alto rango deciden pasarse el problema uno a otro. ¿Mientras tanto qué sucede con aquellos que necesitan una solución?

“Durante su segundo encuentro con la industria de los biocombustibles, el funcionario buscó explicar a los integrantes de la Cámara de Bioetanol de Maíz los motivos en el cambio de la fórmula de la noche a la mañana, el cual afectó a todo el sector”, destaca BAE y luego agrega: “Tanto la industria del bioetanol como la de biodiesel reclaman no sólo que se vuelva atrás con la fórmula sino también que el Estado les devuelva las pérdidas económicas por vender el producto por debajo del valor real a las petroleras, que se han visto beneficiadas con las políticas impartidas hasta este momento por la Secretaría”. A raíz de no obtener ninguna respuesta y mejora, los maiceros han adelantado que el sector del biodiésel analiza en los próximos días presentar un recurso de amparo en la Justicia dada la "incertidumbre" de no tener un precio, lo que genera distorsiones en el mercado y en la continuidad de la actividad. Todo se suma la poca demanda por parte de las petroleras, quienes reconocieron que hay una baja en la producción de naftas.