La cuestión climática en las zonas agrícolas de EE.UU. siguen asustando a los productores de ese país.

Se estima que, por los excesos de humedad, buena parte de lo que se iba a destinar a siembra de maíz, pasará a soja.

La noticia, en principio, es alentadora para el maíz y resulta negativa para la soja. Pues, de ser así, habrá menos maíz y más soja. Algo que ya puede considerarse un hecho.

Obviamente, ello es a favor de la producción de maíz en nuestro país. Y el punto no es de poca monta, dadas las necesidades de rotación en nuestros campos.

Con este cuadro, el aliento para la siembra de soja será menor, acá, en nuestro país.

Pero el cuadro puede tener dos lecturas. Puede que se convierta en una suerte de boomerang.

Porque si las lluvias y tormentas en general persisten, la soja en EE.UU. sufrirá también las consecuencias. Y así el precio internacional podría tener un sustento firme. En definitiva, no faltan muchos días para el comienzo del operativo de siembra.

Habrá que seguir de cerca el problema.

Otro gran problema que atenta contra la soja proviene de China. La extendida enfermedad sobre los porcinos quita una enorme demanda sobre las harinas de soja, y por ende, sobre el poroto.

¿Una buena? Sí. A pesar de la presión oficial, la Reserva Federal de EE.UU. no ha subido la tasa de interés.

Es algo positivo pues así el valor del dólar no tendrá mayor empuje para aumentar respecto a las principales monedas.

¡Buen fin de semana!