Carlos Cruzat, presidente del Comité de Kiwi de Chile comentó a PortalFrutícola.com que para esta temporada se espera un volumen cercano a las 175.000 toneladas, lo que implicaría una baja frente a las 184.000 toneladas de la campaña 2018, aunque el calibre podría ser similar o incluso mejor.

Pero aún falta para que se inicie la cosecha, la cual Cruzat indicó que podría comenzar dentro de las fechas históricas: “De acuerdo a los registros que nosotros tenemos en 12 huertos a lo largo de Chile, los que llamamos nuestros huertos de seguimiento, no tenemos antecedentes de que la fruta venga más adelantada o atrasada que otros años”.

“La materia seca viene con un buen contenido y los sólidos solubles, que son los que determinan finalmente el inicio de la cosecha, dependen más bien de cómo termine el verano”, detalló.

En cuanto a la comercialización, Cruzat destacó que para este año Grecia tendrá un 20% menos de fruta, el cual fue uno de los grandes oferentes del año pasado, por lo que la distorsión de ventas que causó en la temporada no se produciría, ya que no hay tanta fruta en stock de guarda.

Respecto a las razones de la menor producción, el presidente de Comité de Kiwi explicó que existen diferentes razones posibles, pero que hay tres que podrían ser las causantes.

La primera es por la menor superficie plantada, ya que hay plantaciones que dejaron de estar en producción: “Los huertos que han salido son más bien viejos, por lo que no son tan significativos en términos del volumen y calidad”.

El segundo motivo es que en la zona cercana de Curicó hubo Tizón de la flor o Pudrición Gris, lo que según Cruzat “a lo mejor bajó la producción en algunos huertos”.

Por otra parte, las granizadas que se produjeron en la zona central a fines de 2018, principalmente en el norte de la sexta región, podrían haber causado afectación.

Cruzat detalló que la distribución podría ser similar a la del año pasado, cuando se despachó cerca de un 40% a Europa, 15% a Norteamérica, 22% a Latinoamérica, 4% a Medio Oriente y un 20% al Lejano Oriente.

Novedades de la campaña

En esta temporada hay algunos elementos que está trabajando el Comité del Kiwi como potenciar el consumo y mejorar la calidad.

Cruzat comentó que el año pasado se realizaron por primera vez una campaña de promoción en la industria del kiwi.

“El año pasado hicimos una campaña fuerte en la India y probablemente este año vamos a establecer algunas promociones en otros países”.

“A nivel interno en Chile hay dos líneas de trabajo sobre las cuales estamos focalizados, una de ellas es volver a los huertos, mejorar la productividad y con eso la calidad de la fruta”, explicó el presidente del Comité.

Asimismo, precisó que el kiwi es un cultivo que puede ser bien mantenido a lo largo de muchos y que existen huertos muy antiguos con buena productividad, lo que es muy relevante para la mano de obra, sobre todo para la Región de O’Higgins y el Maule.

Esto ya que la industria del kiwi podría servir de complemento a otras industrias, como la de la cereza.

“Para tener mano de obra que sea complementaria con la cereza, tener una industria del kiwi sana y productiva es muy importante, y esa sanidad tiene que ver con el que el productor tenga una utilidad por hectárea, que le justifique seguir trabajando en el negocio y eso tiene que ver con estar produciendo en toda la superficie”.

En tanto, Cruzat aseguró que es necesario mejorar la calidad y que como industria se están preparando para un mercado que tiene menos ventana temprana.

“Se está haciendo un mercado mucho más extendido en el tiempo y para eso necesitamos cosechar fruta con mejores índices y hemos estado desde el año pasado incrementando los índices de cosecha, porque mientras más madura está fisiológicamente la fruta, tiene mejor comportamiento y vida post cosecha”.