Al momento de fijar los ajustes, las pizarras mostraron alzas de US$2,02 y de 2,11 sobre los contratos enero y marzo de la soja, cuyos valores resultaron de 330,79 y de 335,38 dólares por tonelada.

Sin datos concretos sobre posibles nuevas compras chinas en el mercado estadounidense, como consecuencia del cierre parcial del gobierno de EE.UU. -el USDA no está publicando sus habituales reportes-, los operadores centraron ayer su atención sobre la evolución de la campaña de soja en Sudamérica.

Y, en ese sentido, los reportes recibidos desde Brasil dieron cuenta de la combinación de falta de humedad y elevadas temperaturas que ya afecta los cultivos en amplias zonas de Paraná y en áreas de Rio Grande so Sul, Mato Grosso do Sul y de Mato Grosso. Ayer, la consultora FCStone redujo su previsión de cosecha de soja en Brasil de 120,22 a 116,26 millones de toneladas.

En cuanto a la Argentina, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que pese a registrarse pérdidas de lotes por fuertes tormentas, granizo y por abundantes precipitaciones, "el escenario climático continúa siendo favorable en extensas regiones de elevado peso productivo. Sin embargo, de prolongarse la actual tendencia húmeda durante las próximas semanas, la condición de excesos hídricos podría comenzar a comprometer el normal desarrollo de la soja, sobre todo en regiones que cuentan con los perfiles de suelo bien provistos de humedad". La entidad relevó el avance de la siembra sobre el 89,7% de los 17,9 millones de hectáreas previstos.

Acerca de los precios, la demanda volvió a ofrecer $9100 por tonelada de soja para el Gran Rosario y $8900 para Bahía Blanca. El grano de la nueva cosecha se mantuvo en 240 dólares por tonelada. En el Mercado a Término de Buenos Aires las posiciones enero y marzo bajaron US$0,20 y 0,90 tras cerrar con ajustes de 250 y de 245,10 dólares.