La provincia de Santa Fe es una de las más importantes de la República Argentina por su relevante contribución a la actividad económica de nuestro país. El campo, la agroindustria y los agro-alimentos son los “tractores” de la economía santafesina y los pilares fundamentales para asegurar el crecimiento y desarrollo económico y social de todos sus habitantes. 
 
Entre éstos, los granos finos en general y la cadena de trigo en particular no sólo constituyen una de las industrias más tradicionales de nuestra región sino que también la participación santafesina en la producción, molienda y exportación del grano ha aumentado notablemente en los últimos años. 
 
Hay que tener en cuenta, además, que el impacto de la producción de cereales no se limita al sector primario, sino que también impulsa una serie de actividades productoras de bienes y prestadoras de servicios conexos, entre los que se destacan maquinaria agrícola, rodados, insumos para el agro, servicios financieros, transporte y logística, molinería, embarque, entre otros. Todos ellos constituyen la base de la actividad y el empleo de nuestra provincia. En relación a este último, se estima que uno de cada cuatro trabajadores registrados en Santa Fe trabaja directamente en el campo y/o en las cadenas agroalimentarias relacionadas.
 
En relación a la producción, la provincia de Santa Fe tiene una larga tradición en cereales de invierno. Sin embargo, las condiciones comerciales como los avatares climáticos han provocado fuerte vaivenes de la superficie sembrada y la producción. Esto puede observarse en el siguiente gráfico que muestra como la producción ha caído significativamente en la campaña 2008/09 debido a la imposición de ROES y derechos de exportación, mientras que en las campañas 2016/17 y 2017/18 han mostrado una importante recuperación en volumen y producción cuando dichas medidas comerciales se modificaron. 
 
El siguiente mapa muestra el crecimiento en términos porcentuales de la superficie de trigo y cebada de la campaña 2017/18 respecto al promedio de los últimos 5 años. Se puede observar que los departamento coloreados en verde más oscuro (Belgrano, San Cristóbal, San Javier y San Lorenzo) prácticamente duplicaron su área de siembra en la campaña 2017/18 respecto al promedio del periodo analizado. 
 
En los últimos 5 años la superficie provincial de trigo y cebada promedió las 850.000 ha, dando lugar a una producción superior a 2,4 millones de tn. En tanto, la campaña 2017/18 marcó record de superficie sembrada 994.000 ha y 3,3 millones de toneladas. Esto representó el 15% respecto al total de producción nacional, al tiempo que el rinde promedio provincial alcanzó los 34,7 quintales por hectárea, superando el promedio nacional de 33,4 qq/ha.
 
Por el lado de la demanda, en la provincia de Santa Fe no sólo se radica una multiplicidad de molinos harineros, sino que también los puertos del Gran Rosario constituyen la principal vía de salida del cereal argentino al exterior. Estos molinos en muchos casos constituyen el núcleo de la actividad económica de diversas poblaciones del interior, siendo los principales demandantes de mano de obra en las mismas. 
 
En lo que va del año 2018, con datos hasta octubre, la provincia de Santa Fe ha sido responsable del 15% del procesamiento nacional de trigo, con casi 700.000 toneladas. La participación de la provincia en la actividad ha ido en crecimiento durante las últimas dos décadas, partiendo desde un 11% en 1998.
 
Respecto al cereal que tiene como destino la exportación, en Santa Fe se origina cereales por el 13% del valor de lo que se despacha, pero desde sus terminales portuarias se embarca más de la mitad del trigo y la cebada para el año 2017, según datos del INDEC y la Secretaría de Agroindustria para el año 2017. 
 
Como productora de los cereales que satisfacen a la demanda externa, Santa Fe es responsable de la producción de granos finos por un total del 13% del valor de lo exportado en este rubro, para datos del 2017. De este modo, se ubica en el tercer lugar del ranking nacional, por detrás de Buenos Aires (35%) y Córdoba (28%), tal como muestra el mapa adjunto. ​
 
En tanto, más de la mitad de los embarques totales de cebada y trigo se despacharon desde los puertos santafesinos en el año 2017. Si bien tradicionalmente la cebada se produce y exporta en el sur de Buenos Aires, es destacable el aumento de la participación de los puertos del Gran Rosario en los embarques de trigo. Hace apenas 10 años atrás, en el 2007, esta participación caía al 51% mientras que en 1997 apenas alcanzaba el 35%.
 
Es por todo lo antedicho que Santa Fe no sólo se destaca en los anales de la historia productiva argentina como una de las provincias claves en la producción y comercialización de bienes y servicios relacionados a la cadena de valor de cereales, sino que cuenta con la base necesaria para potenciar este liderazgo en el futuro.