La impresión en 3 dimensiones o 3D se abre paso aceleradamente en los procesos industriales de la maquinaria agrícola.

En el mundo, la mayoría de los fabricantes del sector ya ha incorporado la impresión 3D para el diseño.

Se pueden imprimir modelos conceptuales para usar en investigación y desarrollo.

También es posible imprimir prototipos funcionales para detectar defectos de diseño antes de que el producto se fabrique en serie.

Aplicaciones

AGCO, por ejemplo, ya sumó las impresoras 3D en tres en 3 fábricas de Norteamérica para investigar y diseñar nuevos productos y para construir y probar componentes de prototipos en nuevos equipos.

Una ventaja es la reducción de costos respecto a los prototipos de aluminio, y otra consiste en la reducción de tiempos para lograr el producto.

El uso de la impresión 3D permite a los ingenieros crear y probar hasta cinco versiones de la pieza en un período de cinco semanas.

En el Reino Unido, la empresa Buy Any Part lanzó el servicio de fabricación de agropartes nuevas en 3D para ofrecer repuestos de piezas obsoletas y difíciles de encontrar en maquinaria agrícola.

En Argentina

En su planta de Granadero Baigorria (Santa Fe), John Deere sumó una impresora Ultimaker 3 para crear, de forma muy sencilla, piezas cuya complejidad geométrica requeriría múltiples procesos de mecanizado.

Así optimiza tiempos y recursos en la fabricación de herramental, dispositivos y prototipado.

Luego de la capacitación que recibió el equipo de Ingeniería de Manufactura y de dos semanas de pruebas, la impresora se encuentra imprimiendo casi el 100% del tiempo, principalmente prototipos.

Cada pieza fabricada mediante la impresora 3D implica el ahorro del tiempo relacionado a la gestión, encargue y entrega con un proveedor.

Fuente: MaquiNAC