La devaluación del peso frente al dólar , que se aceleró en las últimas semanas, tendrá efectos en cadena sobre los precios de toda la economía en el mediano y el largo plazo. Algunos, sin embargo, sufrirán un golpe más directo que se notará de inmediato en los bolsillos de los consumidores.

Se trata principalmente de los bienes importados, entre los que se cuentan variedades muy cercanas al gusto y a las necesidades del consumidor argentino que van desde remedios, bananas y carne de cerdo hasta motos, atún en lata y consolas de videojuego, para citar algunos ejemplos.